En Olegario estamos implicados con la moda, es más, nuestra vida es la moda del hombre, vestir a los hombres en los mejores momentos de su vida para que puedan quedar bien, tal y como se merecen y requieren.
Sin embargo, vivir para y por la moda del hombre, no es óbice para apreciar y admirar el trabajo de buenos artistas del panorama nacional e internacional y si encima, es amigo y residente en Valencia, todavía nos llena más de orgullo y satisfacción.
Si uno entra en la tienda de Olegario, en la calle San Vicente Màrtir, y ve una bicicleta de acero inoxidable junto a la escalera de subida a la primera planta, o ve un sujeto de color naranja brillante encima de uno de nuestros mostradores, seguramente le llamará la atención de una manera notoria y palpable.
Está claro que estamos hablando de Julián Calatrava. Pintor y escultor valenciano con una dilatada y extensa carrera en el mundo del arte, el cual pasea por casi cualquier rincón del planeta.
Si uno se para a admirar su obra, sus cuadros o sus esculturas, podrá apreciar la exigencia con la que trabaja Julián. Una exigencia que sobrepasa el campo artístico para desarrollar en sus obras un componente cercano y familiar que invita a que, cualquiera de sus trabajos, pueda lucir en el salón de cada una de nuestras casas.
Nos gustan los trabajos de Julián porque mantienen una estética de cómic, de historia, donde el ser humano es el protagonista y la inspiración del autor. Esto encaja perfectamente con la idiosincrasia de Olegario, donde ponemos a la persona por encima de todo a la hora de trabajar nuestros productos, y este es el nexo de unión más importante entre el Arte de Julián y la Moda de Olegario.
Numerosos premios, exposiciones y exhibiciones de sus obras en las mejores y más prestigiosas galerías del mundo y por supuesto, no podían faltar en nuestra tienda algunas de sus obras más representativas. Algunas de las obras que han pasado por nuestra tienda son:
En Olegario nos llena de orgullo la amistad de Julián Calatrava. Admiramos su maravillosa manera de entender el mundo porque sabe disfrutar de sus obras una vez que las ha terminado y es feliz transformando unas cosas en otras, como aquel que imprime el movimiento natural que conforma el viaje del Universo en medio del Cosmos.
La locura de hacer lo que a uno más le gusta, ese diálogo con uno mismo para resolver las preguntas primigenias de qué hago aquí y a dónde voy, que se repite con cada una de sus obras, se resuelven en una maravillosa conversación entre cada pieza y su autor, en la que, seguramente, se imbricarán pieza y autor, sin poder distinguir la una del otro cuando observamos la pieza desde la locura del corazón y no desde la razón de la cabeza.
Y como nosotros vemos a Julián en cada una de sus obras, nos gusta que luzcan en nuestra tienda, que los clientes las vean y puedan apreciar el grandísimo sentido del humor de Calatrava, el juego propuesto con cada pieza y la aventura que supone reflexionar en la misma, sabiendo que Julián, ya se metió un día en ella para resolver sus conflictos personales y emocionales.
Pásate por nuestra tienda y encontrarás esta nueva escultura en uno de nuestros escaparates:
Gracias Julián, por tu amistad y tu confianza en nosotros, para que una parte de ti presida el mayor de nuestros logros, la Tienda de Olegario.